miércoles, 31 de agosto de 2011

Relatos de Un Destello Hecho Mujer

                                                                       A  Alberta Moya

Te sentí cerca
intentando darme vida con tu técnica,
espere,
me enfoque
y como un foco de la nada me ilumine.
Quien iba a pensar que siendo yo tan pequeña
llenaría de imagenes tu vida.

Tu, sin siquiera saberlo
te recreas tanto sobre mi
que hasta aditivos químicos me inyectas.

Me conviertes así en olores
que dan pasaje a los colores
y aquellas cosas que descubriste en mi
al salir de tu placenta.

Todo un umbral de fantasias,
miles de tonos, miles de formas y sabores
le dan sentido a mi sencilla existencia.

No sabría que para ti, arruyarme a tu paso
me haria tan significativa,
dar a luz le llaman,                                           
que palabra tan noble
para quienes cargan en su vientre
la maravilla de la  Vida.      
                        
                                                                       Jessica TM

viernes, 26 de agosto de 2011

Enmudecida

La tele muestra cosas que nadie ve,
los libros cuentan relatos a veces insensatos,
el Señor de la esquina deambulante
se recrea hablando de la gente
sin siquiera observar en sus pupilas.
Los murcielagos circundan y
el reflejo de tus ojos se hace gelido.

Todo conspira en un incesante atarceder y anochecer
quedando las noches al destierro.

Los desechos solidos de tus pesares
se mecen sobre mi esqueleto,
punzantes,
descompuestos,
casi impenetrables.

Llegas así a pensar: la tierra tiene dueño.
Cuando sus gritos desesperados
solo aparecen en silencio.
Aun asi dices amarla,
aun cuando lo que siempre has hecho es dañarla,
al robarle de sus ganas
la curiosidad y el deseo de vibrar
como todo lo vivo
como todo lo que nace dentro del caos de los supuestos.

Lo verdaderamente humano,
el equilibrio con el mundo,
el desconocido escenario
de lo incierto,
de lo pleno.

Emerge asi nuevamente
                                        ella
la palabra
repleta y anidada de silencios.